Voluntariado corporativo: profesionales del sector salud al servicio del bien común
La labor del voluntario en el sector salud se trata de una acción que cambia por completo el presente de una comunidad. Un punteo sobre su trabajo y qué se necesita para su aplicación.

En el último tiempo, el voluntariado corporativo dejó de ser una actividad periférica dentro del mundo empresarial para convertirse en una estrategia que responde a una responsabilidad social.
Esta tendencia en el sector de la salud tiene una gran importancia ya que médicos, enfermeros, psicólogos, técnicos y otros profesionales usan su conocimiento y experiencia no solo para cumplir con sus funciones laborales , sino también para transformar realidades en comunidades vulnerables.
Por ello, el voluntariado corporativo sanitario no solo brinda atención directa, sino que fortalece los lazos sociales, mejores indicadores de salud comunitaria y contribuye al desarrollo sostenible. Con el tiempo, se convirtió en una herramienta de gran importancia para el sector y sobre todo en las comunidades vulnerables.
El voluntariado y el compromiso con las comunidades.
La participación de profesionales del sector de la salud en programas de voluntariado corporativo se trata de una acción concreta como operativos médicos en zonas rurales, siendo parte de campañas de vacunación, talleres de promoción de la salud, acompañamiento psicosocial y capacitación de agentes comunitarios.
Estas actividades en manos de personas con los conocimientos necesarios permiten llevar servicios esenciales a lugares donde el acceso a la salud es limitado o prácticamente no existe.
Un ejemplo se puede ver en diversas clínicas privadas y laboratorios farmacéuticos que, en conjunto con organizaciones sociales, organizan jornadas de s alud integral en barrios populares , comunidades indígenas y asentamientos urbanos informales.
Es en ese escenario que los voluntarios realizan controles clínicos , evaluaciones nutricionales, detección temprana de enfermedades crónicas y orientación sobre hábitos saludables. En muchos casos, este momento es el primer contacto de los pobladores con el sistema de salud formal, lo que es de suma importancia.

Pero el voluntariado corporativo no es solamente brindar servicios de asistencia directa, sino que tiene un objetivo de dar empoderamiento comunitario mediante la educación. Desde enfermeros que enseñan primeros auxilios en escuelas rurales, farmacéuticos que explican el uso correcto de medicamentos hasta nutricionistas enseñan alimentación saludable con son ejemplos de cómo el conocimiento se convierte en una herramienta de transformación social.
También, al involucrarse con empatía y sensibilidad en la realidad de las personas, muchos de los voluntarios tiene acceso a un intercambio con las comunidades, no solo beneficia a los destinatarios de las acciones, sino que enriquece profundamente a quienes participan como voluntarios.
La labor de los voluntarios en escenario vulnerables tiene un gran impacto en la reducción de enfermedades que son prevenibles, en la mejora de indicadores nutricionales y la detección precoz de patologías crónicas. Pero también genera confianza en el sistema de salud, fortalece el trabajo comunitario y promoviendo un cuidado colectivo.
Esto se debe a que cuando un equipo de profesionales hace visitas frecuentes a una comunidad, se pueden generar vínculos, más allá de la asistencia. Se construyen relaciones de confianza, se identifican líderes comunitarios, y muchas veces se genera una red de apoyo.
Cabe resaltar que las empresas del sector salud ya comienzan a entender que su responsabilidad va más allá de brindar servicios o productos, sino que los programas de voluntariado corporativo son una forma concreta de contribuir al bienestar colectivo.
Muchas organizaciones incorporaron estas iniciativas como parte de sus políticas de sostenibilidad y responsabilidad social empresarial (RSE),siguiendo con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
El modelo de voluntariado corporativo estructurado necesita de una planificación estratégica, capacitación de los voluntarios, coordinación con organizaciones sociales locales y medición de impacto. Así, se evita la improvisación y se obtiene los resultados que se buscan.
Pero uno de los principales problemas que enfrenta este modelo es poder garantizar la continuidad de las intervenciones y acciones, ya que las comunidades vulnerables necesitan acompañamiento sostenido en el tiempo debido a que las acciones aisladas no generan el resultado que se espera.
Por eso, muchas empresas están desarrollando alianzas estratégicas para poder trabajar en organizaciones territoriales, de esta forma se puede asegurar la permanencia y seguimiento de los programas.
En un mundo donde la desigualdad en el acceso a la salud siguen siendo uno de los grandes problemas a nivel mundial, el voluntariado corporativo es una herramienta concreta para dar algunas de las respuestas que necesita el sector.
Cuando los profesionales del sector salud se involucran para buscar el bienestar en los más vulnerables, ya no se trata solo de una práctica solidaria, sino de una responsabilidad ética en conjunto con su vocación.
El compromiso de las empresas y organizaciones del sector salud con el voluntariado corporativo debería ser una gran preocupación para su misión institucional, siendo una actividad que puede cambiar la realidad de miles de personas.

